El presente análisis de datos de producción recogidos
en los núcleos de líneas puras de LOHMANN pone de
relieve el tremendo potencial que poseen estas aves. La
toma de datos se llevó a cabo hasta las 102 semanas de edad. A
continuación se analizará en detalle la producción individualizada
de cada ave durante este período, que abarca más de 500 días de
observación. Para ello, se dispone de información individualizada
de cada gallina sobre su producción diaria de huevos
Pico de producción
Las aves se clasificaron en 5 grupos en base a su intensidad de
Tabla 1: Distribución de las aves atendiendo a su intensidad de puesta durante
el pico de puesta
Estas categorías se van a usar posteriormente para mostrar la evolución
de la intensidad de puesta de cada uno de estos grupos en fases más
avanzadas del ciclo de producción.
puesta durante el período de 24 a 48 semanas de edad. Durante
este intervalo de tiempo, el 84% de las aves alcanzaron una
producción media por encima del 90%. Lo que es más, el 22 % de
las aves produjeron al menos 171 huevos vendibles en 175 días,
lo que equivale a un porcentaje de puesta por encima del 98%
(Tabla 1). Este excelente rendimiento solo es posible alcanzarlo si
tan solo en un reducido número de días el ave “estuvo ociosa” y no
se produjo una ovoposición. Hubo incluso un grupo de aves en
el lote que produjo 175 huevos en 175 días, es decir, mantuvieron
una intensidad de puesta del 100% durante 25 semanas. Producir
un huevo comercializable con una buena cáscara cada día y
aproximadamente a la misma hora ¡es el límite biológico del ave!
Ciclo productivo hasta las 102 semanas de edad
El 55% de las aves se mantuvieron por encima del estándar
comercial durante todo el ciclo productivo. Es más, incluso las
aves con una intensidad de puesta durante el pico de producción
entre el 90 y el 94%, que por tanto no alcanzaron el estándar
durante estas primeras 25 semanas, mostraron una buena
persistencia de puesta. En consecuencia, en la segunda fase de
producción, este grupo de aves consiguió producir por encima
del estándar. Por lo tanto, la primera conclusión es que tan solo
un pequeño porcentaje de las aves no consiguieron alcanzar el
estándar en la fase tardía de producción (Figura 1).
Desde el primer huevo dentro del período analizado a las
21 semanas hasta las 102 semanas de edad, las aves produjeron
en largas secuencias de puesta. Un 8% de las aves tuvieron una
secuencia de puesta de al menos 180 huevos. Producir 180
huevos en una única secuencia de puesta significa que estas aves
produjeron un huevo todos y cada uno de los días durante un
período de seis meses sin un único día de pausa. La intensidad
de puesta media de estas aves fue del 96% durante los 574 días
de producción. El 46% de las aves alcanzaron una secuencia de
al menos 90 huevos, es decir, pusieron un huevo durante tres
meses seguidos. Los huevos que se obtuvieron de estas grandes
secuencias mostraron una calidad de cáscara aún mejor que los
huevos que se obtuvieron de secuencias más pequeñas (Tabla
2). Por otro lado, hubo un grupo representado por el 3% de las
aves del lote con un ritmo de puesta muy irregular, con menos
de 30 huevos seguidos en una secuencia y con un tamaño de
huevo menor que la media. Parece que estas aves no encontraron
su ritmo óptimo de puesta. En resumen, la mayoría de las aves
(el 97% del lote), pusieron huevos en secuencias de más de 30
huevos y con una buena calidad de huevo.
Para mostrar el sobresaliente nivel productivo de las aves
LOHMANN, la media y el rango de la secuencia de puesta más larga
de cada ave se expone con mayor detalle en la Tabla 3. Como se
puede observar, existe una gran variación en la máxima secuencia
de huevos de las gallinas dentro de una misma categoría. Dentro
del grupo de aves que produjeron al máximo nivel biológico
durante el pico de puesta, existen aves que consiguieron alcanzar
secuencias de puesta de hasta 400 huevos. Producir 400 huevos
vendibles en 400 días es una marca difícil de batir. Por otro lado,
en la siguiente categoría, con aves con una excelente producción
Figura 1: Curvas de producción de las diferentes categorías en comparación con el estándar.
Tabla 2: Producción y calidad de huevo atendiendo a la secuencia de puesta más larga de un ave
Figura 2: Distribución de las secuencias de puesta más largas de cada ave
por encima del 98%, también se encontraron aves con grandes
secuencias de puesta, si bien también existió una gran variación,
moviéndose éstas en un rango entre 64 y 343 huevos. Si la
secuencia más larga se correspondió con 64 huevos, implica
que el ave estuvo produciendo en secuencias de puesta muy
constantes. Sin embargo, normalmente la mayoría de las aves
que produjeron por encima del estándar, presentaron cierta
variación en el tamaño de sus secuencias (Figura 2). La mayoría
de las aves comenzaron con secuencias cortas a edades jóvenes y
aumentaron el tamaño de las mismas progresivamente.
A diferencia de la secuencia máxima de huevos, el número de
días sin oviposición entre secuencias no muestra gran variación,
pues mayoritariamente fue de tan solo un día. Producir huevos
vendibles en largas secuencias de puesta con tan solo un día
de pausa entre ellas, requiere un perfecto control del ritmo de
ovulación y resulta en una intensidad de puesta sobresaliente que
es aplicable a la mayoría de las aves LOHMANN.
Teniendo en cuenta los datos productivos analizados, se puede
concluir que las aves LOHMANN están preparadas para producir
huevos a un extraordinario nivel durante largos ciclos productivos
de más de 100 semanas. La mayoría de gallinas en un lote produce
huevos en largas secuencia de puesta y tan solo se toman una
pausa de un día entre dos secuencias consecutivas, produciendo
de esta forma un huevo casi todos los días. Para alcanzar este
nivel productivo, es necesario que el alimento y el agua les sean
suministrados diariamente en la cantidad y calidad adecuada.
Dr. Wiebke Icken
Tabla 3: Variación en las secuencia de puesta dependiendo de la categoría productiva.