LA IMPORTANCIA DEL PERÍODO DE PREPARACIÓN PARA CICLOS PRODUCTIVOS PROLONGADOS DE LAS PONEDORAS LOHMANN

LOHMANN BREEDERS

El período de levante de las ponedoras representa un papel crucial en la determinación del éxito y longevidad de su ciclo productivo. Con los recentes avances en la genética y la nutrición, ya es posible extender el ciclo productivo de las aves comerciales hasta 90-100 semanas. Ese período productivo alargado no solamente contribuye para aumentar la lucratividad, sino que promueve mayor sostenibilidad en la cadena de producción de alimento.

El papel del período de preparación

Para lograr un ciclo de producción exitoso y prolongado, se debe prestar la debida atención al período de preparación, que abarca desde las 0 a las 32 semanas de edad.

Durante este período, las gallinas pasan por importantes procesos de desarrollo que serán las bases de su desempeño futuro. Es fundamental centrarse en el desarrollo del sistema inmunológico, el sistema digestivo y el sistema esquelético durante el período de preparación.

Desarrollando el sistema inmunológico

Desde el primer día es primordial priorizar el desarrollo del sistema inmunológico en las gallinas ponedoras. Esto se puede lograr mediante prácticas estratégicas de nutrición y manejo.

Proporcionar el equilibrio adecuado de nutrientes, incluidas vitaminas y minerales esenciales, es fundamental para fortalecer el sistema inmunológico y garantizar la salud y el bienestar de las aves. Un sistema inmunológico fuerte ayudará a las gallinas a combatir enfermedades y factores estresantes durante su prolongado ciclo de producción.

Desarrollo del crecimiento corporal y la salud esquelética

Se debe prestar mucha atención al desarrollo del peso corporal de las aves durante el período de preparación.

El desarrollo adecuado del peso corporal es crucial para lograr una persistencia y viabilidad óptimas en la fase de puesta. Es fundamental garantizar que las gallinas alcancen los standares de peso corporal adecuados en cada etapa de su crecimiento.

Además, la salud esquelética es de suma importancia ya que no sólo garantiza la formación estructural para las gallinas sino que también actúa como almacén de calcio, que es vital para la formación de la cáscara del huevo.

La importancia de la nutricion en los ciclos de producción alargados

La nutrición juega un papel importante en la prolongación del ciclo de producción de las gallinas Lohmann.

Se debe proporcionar una nutrición adecuada durante todo el ciclo de producción, prestando especial atención al último período de puesta, cuando la absorción de nutrientes y la inmunidad disminuyen.

Balance energético y proteico

La ingesta adecuada de energía es crucial para satisfacer las necesidades de crecimiento, cobertura de plumas y producción de huevos de las gallinas.

Sin embargo, la sobrealimentación puede provocar un aumento excesivo de peso corporal, lo que afecta negativamente la tasa de producción y la calidad del huevo. Es importante lograr el equilibrio adecuado en la ingesta de energía para garantizar un rendimiento óptimo sin comprometer la salud y el bienestar general de las gallinas. De manera similar, el equilibrio de proteínas y aminoácidos es esencial para influir en el tamaño y el peso del huevo.

Lograr el equilibrio adecuado de proteínas y aminoácidos en la dieta puede contribuir a la productividad y calidad general de los huevos.

Entrenamiento para sistemas libres de jaulas

Para las aves destinadas a sistemas libres de jaulas, la capacitación debe completarse a las 32 semanas de edad.

Durante este período, las gallinas deben estar expuestas a los requisitos ambientales y de comportamiento específicos de los sistemas libres de jaulas. Esta formación les ayudará a adaptarse a sus futuras condiciones de alojamiento y promoverá una adaptación de su comportamiento, vital para su bienestar y productividad.

Conclusión

El período de preparación, que comprende la fase de cría/recría de las gallinas ponedoras, juega un papel crucial a la hora de prolongar su ciclo productivo.

A través de prácticas adecuadas de nutrición y manejo, incluido el desarrollo del sistema inmunológico, capacitación para sistemas de alojamiento específicos y atención al crecimiento del peso corporal y la salud esquelética, las gallinas ponedoras pueden prepararse para un ciclo de producción extendido.