Alimentando la persistente ponedora moderna – el 2016 y más allá
El progreso genético seguirá.
Las ponedoras híbridas modernas de hoy muestran unas productividades espectaculares si se manejan bien. Y lo que es más, su progreso genético seguirá adelante ante las demandas de la industria de ponedoras aún más prolíficas para un mayor provecho en la producción de huevos.
Por lo tanto, los principales objetivos de selección continuarán siendo de gran importancia en los índices de selección. Estos son una mayor persistencia de la puesta y una mayor vida productiva con vistas a producir más huevos por gallina alojada. Hoy estamos hablando de puestas de 500 huevos por gallina o de gallinas que llegan a las 100 semanas. Quizás veamos mayores índices de puesta y vidas productivas más prolongadas muy pronto. Nuevas herramientas de selección como la selección genómica contribuirán a este progreso.
Por lo que la industria tiene que ponerse al nivel del potencial genético del que ya disponemos y el cual supondrá un todavía mayor desafío para todos los operadores de la industria.
Una mejor comprensión de la cría como inversión básica.
Bajo los objetivos citados, la fase de cría de las ponedoras modernas debe entenderse como una inversión general básica para el siguiente periodo productivo. Incluso con sistemas de cría mejores o más caros, los costes de la cría por huevo se reducirán con el aumento de la producción en la puesta.
Hoy día, la cría a menudo se entiende como un periodo de gasto. La correcta comprensión de la cría de las pollitas debe basarse en su perfil de crecimiento biológico.
El desarrollo óptimo del peso vivo durante las fases tempranas de crecimiento y un crecimiento más intenso en la segunda mitad de la fase de cría son requerimientos cruciales. Esto significa que deben evitarse tanto sobrepesos como bajos pesos al final de la cría. Debe ponerse un especial énfasis en una nutrición y manejo óptimos en la fase de transición. La elevada importancia del manejo en la fase de prepuesta, en lo que se refiere a nutrición y manejo en la granja, nunca estará suficientemente atendida. La regla básica es: un buen arranque, una buena productividad el resto de la vida de la gallina.
Atención continua a la calidad de la cáscara en la puesta tardía.
Considerando su ovulación continua, las gallinas producirán un huevo hasta que se las sacrifique. Por lo que la calidad de la cáscara será la principal y única razón para el desalojo de un lote altamente prolífico. Los últimos años ha sido relativamente fácil conseguir una suficiente calidad de la cáscara en ciclos productivos de un año, lo que supone llegar a unas 72 semanas de edad. Si los productores de huevos, hoy y en el futuro, intentan utilizar el potencial genético completo de la gallina, enfrentarán inmediatamente la cuestión de cómo mantener la calidad de la cáscara en los lotes que van envejeciendo.
La principal demanda es el aporte básico de calcio como ‘nutriente’ para la cáscara. Además, existen muchas otras herramientas creativas para apoyar a la gallina en su envejecimiento, como potentes aditivos alimentarios. Algunos de ellos pueden ser costosos pero se verán compensados con la venta de huevos con buena calidad de la cáscara.
Nutrición – ¿conseguir más con menos? La nutrición de la ponedora moderna debe focalizarse en una mejor eficiencia puesto que el alimento no será más barato en el futuro. La economía mundial enfrenta una mayor demanda de materias primas para la producción de piensos y alimentos.
Esto nos lleva a una elevada volatilidad y a escaseces periódicas. La reducción de la proteína bruta, junto a un mayor énfasis en los aminoácidos digestibles, será uno de los aspectos principales de la nutrición. Es más, el uso de enzimas ofrece una gran oportunidad para la extracción de más nutrientes de materias primas comunes. Puesto que los enzimas para polisacáridos no amiláceos (NSP) extraen más nutrientes de las materias primas actuales, puede esperarse que nuevos productos con este mecanismo de acción estén en camino. Como ejemplo de buena aceptación y prominencia debe mencionarse la fitasa. Este aditivo alimentario ha reducido la necesidad de introducir fosfatos como materias primas en las raciones ya a niveles muy importantes. Puede esperarse muy p r o n t o
Figura 1: Progreso genético de las ponedoras Lohmann
un nuevo sistema de evaluación del fósforo que permita reducir los niveles de fósforo en las dietas avícolas habituales hoy día. Nuevos conocimientos y mejores productos relacionados con las fitasas apoyarán este progreso. La alimentación para la salud intestinal, para una mejor absorción de nutrientes, dará soporte adicional al título de este apartado – que incluso promueve la utilización de nuevos aditivos alimentarios de actividad no antibiótica.
Economía de alimentos de alta densidad vs. baja densidad.
Con una visión global de la nutrición de las ponedoras enfrentamos una elevada variabilidad en la composición de las materias primas y en la densidad nutritiva de la ración. Sin embargo, la productividad de las ponedoras actuales es bastante similar en todo el mundo, siempre que las aves sean capaces de ajustar su nivel de ingesta para garantizar el cubrimiento de sus requerimientos nutricionales. A menudo las aves no logran comer suficiente por la baja densidad del alimento y sufren deficiencias nutricionales. El retorno de un alimento de baja o alta densidad dependerá de la disponibilidad de materias primas y de los objetivos de producción. Incluso con la mayoría de ponedoras alimentadas con dietas de maíz y soja, aún es posible alimentarlas sin nada de maíz o nada de soja. Estas dietas pueden mostrar una menor densidad de nutrientes.
Sin embargo, las gallinas podrán mostrar una excelente productividad siempre que puedan adaptar su ingesta a sus requerimientos nutricionales. Estas raciones pueden mostrar un buen retorno cuando el maíz o la soja sean raros en el mercado.
¿Disponibilidad de materias y primas y nuevas materias primas?
Como ya hemos señalado, no es normal disponer de forma sostenida de suficientes materias primas en términos de cantidad y calidad para la fabricación del alimento.
De ahí que las dietas no sean tan constantes como lo fueron en el pasado, lo cual ofrece la posibilidad de ampliar el rango de materias primas y la experiencia de formular estas nuevas raciones para ponedoras.
Además, se observa un aumento del interés en nuevas materias primas como insectos, larvas y algas marinas. Se publican cada vez más pruebas científicas que muestran las oportunidades de uso de estas nuevas materias primas. Esta estrategia además ofrece la oportunidad de reducir la inclusión de otras materias primas más caras, como la soja o la harina de pescado por ejemplo.
De un buen pienso, un buen alimento.
La salud del consumidor es una cuestión importante cuando consideramos la alimentación de la población mundial. En los llamados países desarrollados la salubridad de los alimentos y los eslóganes asociados son determinantes en la elección de la comida diaria. Esto exige materias primas saludables y seguras para la producción de alimentos básicos, como son huevos o carnes. A fin de poder producir huevos y carnes seguros, los piensos para los animales deben ser también saludables y seguros.
Con ello se entiende dejar fuera bacterias como Salmonella u otros contaminantes no deseados. Esta demanda básica pone una especial presión en la industria de la alimentación animal, sobre todo en los alimentos que se mezclan in situ, para cumplir con estas exigencias. Por lo que la higienización de los piensos se convertirá en un desafío cada vez más importante. Estos procedimientos son cada vez más comunes en la producción de piensos para aves de selección y son de fácil aplicación, siempre que haya voluntad para ello.
Influencias de las tendencias en bienestar y de la distribución.
El alojamiento animal en general y la producción de huevos en particular presentan un gran interés desde el punto de vista del bienestar. Esta situación ya tiene un gran impacto en la producción de leche, carne y huevos en muchos países. Además, las tiendas y supermercados cuentan con sus propias ideas para promover las ventas de productos animales con eslóganes relacionados con el bienestar. En términos de piensos avícolas esto suele comenzar con la prohibición del uso de antibióticos y de aditivos alimentarios en la ración de las aves. En lo relativo a ponedoras, la idea más común es la de pasar de las bien establecidas jaulas a distintos sistemas de alojamiento alternativos. En el extremo tenemos la producción biológica que en muchos países se orienta a sistemas de producción en campo abierto y con normas arbitrarias en la alimentación. De hecho, algunos países europeos están enfrentando el desafío de prohibir cualquier tipo de tratamiento de corte de picos en un futuro cercano.
Robert Pottgueter
Las ponedoras híbridas modernas de hoy muestran unas productividades espectaculares si se manejan bien. Y lo que es más, su progreso genético seguirá adelante ante las demandas de la industria de ponedoras aún más prolíficas para un mayor provecho en la producción de huevos.
Por lo tanto, los principales objetivos de selección continuarán siendo de gran importancia en los índices de selección. Estos son una mayor persistencia de la puesta y una mayor vida productiva con vistas a producir más huevos por gallina alojada. Hoy estamos hablando de puestas de 500 huevos por gallina o de gallinas que llegan a las 100 semanas. Quizás veamos mayores índices de puesta y vidas productivas más prolongadas muy pronto. Nuevas herramientas de selección como la selección genómica contribuirán a este progreso.
Por lo que la industria tiene que ponerse al nivel del potencial genético del que ya disponemos y el cual supondrá un todavía mayor desafío para todos los operadores de la industria.
Una mejor comprensión de la cría como inversión básica.
Bajo los objetivos citados, la fase de cría de las ponedoras modernas debe entenderse como una inversión general básica para el siguiente periodo productivo. Incluso con sistemas de cría mejores o más caros, los costes de la cría por huevo se reducirán con el aumento de la producción en la puesta.
Hoy día, la cría a menudo se entiende como un periodo de gasto. La correcta comprensión de la cría de las pollitas debe basarse en su perfil de crecimiento biológico.
El desarrollo óptimo del peso vivo durante las fases tempranas de crecimiento y un crecimiento más intenso en la segunda mitad de la fase de cría son requerimientos cruciales. Esto significa que deben evitarse tanto sobrepesos como bajos pesos al final de la cría. Debe ponerse un especial énfasis en una nutrición y manejo óptimos en la fase de transición. La elevada importancia del manejo en la fase de prepuesta, en lo que se refiere a nutrición y manejo en la granja, nunca estará suficientemente atendida. La regla básica es: un buen arranque, una buena productividad el resto de la vida de la gallina.
Atención continua a la calidad de la cáscara en la puesta tardía.
Considerando su ovulación continua, las gallinas producirán un huevo hasta que se las sacrifique. Por lo que la calidad de la cáscara será la principal y única razón para el desalojo de un lote altamente prolífico. Los últimos años ha sido relativamente fácil conseguir una suficiente calidad de la cáscara en ciclos productivos de un año, lo que supone llegar a unas 72 semanas de edad. Si los productores de huevos, hoy y en el futuro, intentan utilizar el potencial genético completo de la gallina, enfrentarán inmediatamente la cuestión de cómo mantener la calidad de la cáscara en los lotes que van envejeciendo.
La principal demanda es el aporte básico de calcio como ‘nutriente’ para la cáscara. Además, existen muchas otras herramientas creativas para apoyar a la gallina en su envejecimiento, como potentes aditivos alimentarios. Algunos de ellos pueden ser costosos pero se verán compensados con la venta de huevos con buena calidad de la cáscara.
Nutrición – ¿conseguir más con menos? La nutrición de la ponedora moderna debe focalizarse en una mejor eficiencia puesto que el alimento no será más barato en el futuro. La economía mundial enfrenta una mayor demanda de materias primas para la producción de piensos y alimentos.
Esto nos lleva a una elevada volatilidad y a escaseces periódicas. La reducción de la proteína bruta, junto a un mayor énfasis en los aminoácidos digestibles, será uno de los aspectos principales de la nutrición. Es más, el uso de enzimas ofrece una gran oportunidad para la extracción de más nutrientes de materias primas comunes. Puesto que los enzimas para polisacáridos no amiláceos (NSP) extraen más nutrientes de las materias primas actuales, puede esperarse que nuevos productos con este mecanismo de acción estén en camino. Como ejemplo de buena aceptación y prominencia debe mencionarse la fitasa. Este aditivo alimentario ha reducido la necesidad de introducir fosfatos como materias primas en las raciones ya a niveles muy importantes. Puede esperarse muy p r o n t o
Figura 1: Progreso genético de las ponedoras Lohmann
un nuevo sistema de evaluación del fósforo que permita reducir los niveles de fósforo en las dietas avícolas habituales hoy día. Nuevos conocimientos y mejores productos relacionados con las fitasas apoyarán este progreso. La alimentación para la salud intestinal, para una mejor absorción de nutrientes, dará soporte adicional al título de este apartado – que incluso promueve la utilización de nuevos aditivos alimentarios de actividad no antibiótica.
Economía de alimentos de alta densidad vs. baja densidad.
Con una visión global de la nutrición de las ponedoras enfrentamos una elevada variabilidad en la composición de las materias primas y en la densidad nutritiva de la ración. Sin embargo, la productividad de las ponedoras actuales es bastante similar en todo el mundo, siempre que las aves sean capaces de ajustar su nivel de ingesta para garantizar el cubrimiento de sus requerimientos nutricionales. A menudo las aves no logran comer suficiente por la baja densidad del alimento y sufren deficiencias nutricionales. El retorno de un alimento de baja o alta densidad dependerá de la disponibilidad de materias primas y de los objetivos de producción. Incluso con la mayoría de ponedoras alimentadas con dietas de maíz y soja, aún es posible alimentarlas sin nada de maíz o nada de soja. Estas dietas pueden mostrar una menor densidad de nutrientes.
Sin embargo, las gallinas podrán mostrar una excelente productividad siempre que puedan adaptar su ingesta a sus requerimientos nutricionales. Estas raciones pueden mostrar un buen retorno cuando el maíz o la soja sean raros en el mercado.
¿Disponibilidad de materias y primas y nuevas materias primas?
Como ya hemos señalado, no es normal disponer de forma sostenida de suficientes materias primas en términos de cantidad y calidad para la fabricación del alimento.
De ahí que las dietas no sean tan constantes como lo fueron en el pasado, lo cual ofrece la posibilidad de ampliar el rango de materias primas y la experiencia de formular estas nuevas raciones para ponedoras.
Además, se observa un aumento del interés en nuevas materias primas como insectos, larvas y algas marinas. Se publican cada vez más pruebas científicas que muestran las oportunidades de uso de estas nuevas materias primas. Esta estrategia además ofrece la oportunidad de reducir la inclusión de otras materias primas más caras, como la soja o la harina de pescado por ejemplo.
De un buen pienso, un buen alimento.
La salud del consumidor es una cuestión importante cuando consideramos la alimentación de la población mundial. En los llamados países desarrollados la salubridad de los alimentos y los eslóganes asociados son determinantes en la elección de la comida diaria. Esto exige materias primas saludables y seguras para la producción de alimentos básicos, como son huevos o carnes. A fin de poder producir huevos y carnes seguros, los piensos para los animales deben ser también saludables y seguros.
Con ello se entiende dejar fuera bacterias como Salmonella u otros contaminantes no deseados. Esta demanda básica pone una especial presión en la industria de la alimentación animal, sobre todo en los alimentos que se mezclan in situ, para cumplir con estas exigencias. Por lo que la higienización de los piensos se convertirá en un desafío cada vez más importante. Estos procedimientos son cada vez más comunes en la producción de piensos para aves de selección y son de fácil aplicación, siempre que haya voluntad para ello.
Influencias de las tendencias en bienestar y de la distribución.
El alojamiento animal en general y la producción de huevos en particular presentan un gran interés desde el punto de vista del bienestar. Esta situación ya tiene un gran impacto en la producción de leche, carne y huevos en muchos países. Además, las tiendas y supermercados cuentan con sus propias ideas para promover las ventas de productos animales con eslóganes relacionados con el bienestar. En términos de piensos avícolas esto suele comenzar con la prohibición del uso de antibióticos y de aditivos alimentarios en la ración de las aves. En lo relativo a ponedoras, la idea más común es la de pasar de las bien establecidas jaulas a distintos sistemas de alojamiento alternativos. En el extremo tenemos la producción biológica que en muchos países se orienta a sistemas de producción en campo abierto y con normas arbitrarias en la alimentación. De hecho, algunos países europeos están enfrentando el desafío de prohibir cualquier tipo de tratamiento de corte de picos en un futuro cercano.
Robert Pottgueter